Una vez encendido el motor o cuando el vehículo esta detenido con el motor en marcha, se encuentra en régimen de relanti.
Para comenzar a circular, se precisa de mas fuerza o energía que para mantener el automovil a una determinada velocidad.
Facilitar esta labor es el trabajo de la primera velocidad.
Esta velocidad es la mas corta de todas y la que mayor fuerza trasmite al vehículo.
Pero en contrapartida es la que provoca un mayor consumo de combustible.
En consecuencia se debe acelerar de forma suave y progresiva para cambiar rápidamente a la segunda velocidad aproximadamente a los dos segundos o a unos seis metros de trayecto recorrido.
Se utiliza la primera marcha solo para lo que resulta imprencidible el inicio de la velocidad.